La fantástica actuación de David Nalbandian terminó de darle la peliadísima serie a Argentina. Ahora que todo terminó, creo que lo más conveniente es quemar los libros... Esos que hicieron pensar que en los papeles Argentina estaba realmente complicada para ganarle a Suecia... pero algo extraño pasó... Nalbandian hizo una llamada, tomó un avión y cuando pisó tierra sueca algo en el ambiente de la serie cambió...
No quiero atribuir la victoria argentina a algún poder místico especial; pero sí quiero ponerle una "fichita" a la chapa y a grandeza de Nalbandian. Primero por el simple hecho de arriesgar su físico y su recuperación para jugar una serie que "casi" estaba perdida; y después por lanzarse a jugar el quinto punto... "Un hecho dice más que mil palabras"; tiró "Tito" Vázquez cuando terminó la serie; y creo que la actitud y predisposición de David dijeron mucho...
Pero no todo quedó en ese acontecimiento...
Además de la extraordinaria actuación de David en los dos puntos que disputó (lo de extraordinaria no es tanto por lo tenístico sino por lo emocional), vale destacar la gran participación que tuvo "Tito" Vázquez al planificar la serie. Se arriesgó con la inclusión de Mayer como el singles número uno y después terminó mandando a la cancha a Nalbandian cuando las papas quemaban... todo un estratega el señor Modesto.
En resumen, Argentina hizo las cosas a la perfección; perdió los puntos que tenía que perder ante Soderling, y les robo los tres puntos claves de la serie...
No hay comentarios:
Publicar un comentario